martes, 2 de octubre de 2012

La Protección de Khimaira

Me llaman la bestia de mil formas, porque aunque mis apariencias sean muchas, mi corazón, mi mente y mi alma, siguen siendo los mismos. Benditos aquellos que no juzgan por las apariencias, porque aquellos no ven con los ojos. 

Ahora que me necesitas, ahora mismo iré por ti, recuerda que una vez te dije, cuando me necesites yo estaré ahí, y aun así, no me necesites, esperaré por ti. No importa cuántos collados o valles tenga que cruzar para verte o para saber de ti, no importa si mi corazón está herido, dañado, golpeado o fosilizado, aun así, guardé las fuerzas suficientes para estar contigo y darte todo de mí.
Sí, tú al igual que yo, eres otro corazón solitario que hurga en las cenizas del brasero, anhelando una cálida mirada o esperando una tierna sonrisa. Y a pesar que muchas veces no encontramos eso en aquella persona que amamos, nos volvemos mendigos y pródigos del amor, tratando de llenar los vacíos de nuestros corazones, con vanas migajas de amor, que a la postre solo nos hacen sentir un placer momentáneo, pero no son la cura definitiva para el amor que tanto anhelamos.
¡Oh querida amiga mía! Tú que recorres los bosques sombríos del ayer, tú que nadas en las aguas oscuras de leteo, y que ya no quieres creer más en las fábulas del presente amor. Ya no deseas amar, porque sabes que el precio de ese amor es un letargo y tormentoso sufrimiento. Tú al igual que yo, vas perdiendo la fe en el amor, porque con cada cosa que ves, con cada cosa que te enteras, o con las amistades que te cuentan y te dicen "Estoy muy feliz, porque encontré a la persona que amo", para mañana o más tarde decirte "¿Sabes? Me equivoque, esa persona me falló" o quizá algo peor y te digan "Yo le fallé!". Entonces al igual que yo, vuelves a tu caverna, decepcionada, desilusionada y sintiéndote miserable, porque sabes que tarde o temprano te pueden hacer lo mismo. Así mi querida amiga, ya no te dan ganas de amar a nadie y buscas ser fría como los glaciares y dura como las montañas, porque algunas veces parece ser que entre "amar" y "no-amar", mejor es lo segundo.
¡Oh querida amiga mía! Princesa de la oscuridad, sabes que solamente un solitario como yo puede comprenderte, porque entre los espíritus libres y solitarios, nos comprendemos mejor que ninguno, pero los demás no pueden, ni podrán comprenderte, porque buscan satisfacer su propio capricho, buscan satisfacer su propio yo, buscan solo pasar una noche contigo y luego por la mañana desaparecer. dejándote desnuda no solo el cuerpo, sino también el alma. Y estos usurpadores del amor, no son capaces de dar la cara en otro momento, a no ser que quieran nuevamente alimentar a sus cuerpos. Pero debes saber algo más, amiga mía, el deseo no es malo, lo malo del deseo viene, cuando solo una de las partes busca saciar su apetito sexual y la otra no, y ¿sabes por qué digo esto? Porque el deseo es la esencia del hombre. 
¡Oh querida amiga mía! Oscuro es el carmesí de tu llanto y tu canto se torna para mí, un crepúsculo del ocaso, pero trata que no desaparezca tu mirada sombría de tu rostro, ni la hermosa sonrisa que embellece tu ser, porque sino, esta puede afectar tu alma, y debes procurar por tu bien, que no sea así. Además debes estar preparada, tal como las poderosas hechiceras medievales llevaban un lema en sus corazones "In Omnia Paratus" (¡Estoy preparada para todo!), así también debéis llevar este lema en tu corazón y recordarlo siempre que atravieses alguna dificultad. Sabes que por más lejos que estén nuestros corazones y nuestras almas distantes, siempre podrás encontrar un refugio en mis brazos y siempre que lo requieras podremos salir a caminar por aquellos bosques sombríos, hasta perdernos en medio de la noche.
¡Oh querida amiga mía! Debes saber que los creadores de ilusiones y falsos amores, no son más que viles embusteros y condenados ególatras y sibaritas, porque para ellos, el "crear" su falso "amor" resultó ser muy fácil, pero grave y dañino para ti. Esos aduladores y envenenadores de palabras, en vez de crear falsas esperanzas y falsos advenimientos sobre el lenguaje del amor, deberían de ponerse a trabajar por amor, si bien dicen algunos que para amar hay que actuar y otros dicen que la prueba del amor es el placer carnal, yo os digo, que la máxima prueba de amor, no son las acciones supérfluas, mucho menos la carne, la única prueba de amor que yo os considero, es el servicio. Servir y vivir para la otra persona, esa es la prueba que yo os traigo.
Así es querida amiga mía, como ahora me torno en un lobo estepario, en un lobo solitario de color negro, que ha terminado su elogio de la locura, y va en busca de ti, sin importarle lo que tenga que atravesar. Es así, como ahora te encuentro, con el alma desnuda y es así como te quiero, para llevarte sobre mi lomo y decirte que puedes descansar todo el largo viaje, que yo te estaré cuidando, cierra tus bellos ojos y monta sobre mi lomo, porque el camino es largo, pero a donde te llevo serás siempre libre, serás más libre que los demás, serás más libre que los pájaros y los peces del mar, porque tú para mí, eres una bella Flor entre las flores, y Diosa entre las diosas, pues el sendero por el cual te llevo se llama: LIBERTAD.
Aprendiste a caminar sola en la completa oscuridad, mientras te buscabas a ti misma, pero ahora ya sabes que aunque estés o sigas sola, yo siempre estaré contigo, ya sabes donde encontrarme, y aunque muchos me llamen "el oscuro", mi nombre es Khimaira, el guardían de las mil formas, pero que posee un solo corazón y una sola alma, que siempre esté en donde esté, no importando la distancia, el tiempo o el lugar, siempre te llevaré  presente.

     


Escrito por: David Efraín Misari Torpoco 

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