El hombre sabio ¿a qué temerá?

La filosofía estoica se caracteriza por enseñar a vivir de acuerdo a la razón y a tratar de alcanzar la virtud, pero ¿será una labor sencilla lograr esto? Claro que no lo es, pues una persona deberá poner mucho de su parte si pretende (al menos) procurar llevar una vida tranquila. El primer paso para lograr esto es aprender a no preocuparnos por varios factores externos, pero sobre todo a perder el miedo, a perder el temor a muchas cosas. Entonces, el hombre sabio ¿a qué temerá? Siguiendo los consejos de Musonio Rufo y Séneca obtengo las siguientes respuestas.

1. ¿Temerá a ser desterrado?
Respuesta: haré de cuenta que nací en aquel lugar donde se me asigne.

2. ¿Temerá a la vejez?
Respuesta: un fruto es más rico cuando madura, puesto que puede disfrutarse mejor su sabor.

3. ¿Temerá al destino?
Respuesta: el filósofo es dueño de su propio destino.

4. ¿Temerá a Dios?
Respuesta: el hombre sabio no teme a las invenciones creada por la turba.

5. ¿Temerá a enamorarme?
Respuesta: el único amor del cual hay que enamorarse es del amor al conocimiento.

6. ¿Temerá a quedarse pobre?
Respuesta: la austeridad y una vida frugal es lo mejor. Se debe amar a la pobreza, porque ella nos enseña realmente a los que nos aman (Séneca).

7. ¿Temerá a la enfermedad?
Respuesta: todo mal es pasajero con los debidos cuidados, y si en caso sea algo crónico, no desesperaré y lo aceptaré con mansedumbre, pues empeñaré mi vida en hacer buenas obras, lo que me resta de días.

8. ¿Temerá a la muerte?
Respuesta: debo decir, ya no podré enfermarme, ni perturbar mi alma, ni sentiré dolor nuevamente. A la muerte, la acepto con hidalguía.

Si traigo algunas preguntas similares a la actualidad en que vivo, entonces podré formular las siguientes preguntas con sus respectivas respuestas.

1. ¿Temeré a que no pueda ir al cine?
Respuesta: más bien diré que ya no gastaré mi dinero en espectáculos públicos. 

2. ¿Temeré a que no me dejen ingresar a supermercados?

Respuesta: casi nunca fui a supermercados y las pocas veces que lo hice, todo fue normal. Además, encuentro alimentos en bodegas cerca a mi casa y a cómodos precios o puedo solicitar servicio delíveri.

3. ¿Temeré a no ingresar a restaurantes?
Respuesta: casi nunca me gustó comer fuera de mi casa, así que no tengo ningún problema en no asistir a restaurantes, pues con o sin pandemia, siempre como en mi casa. Además, aprendí de Spinoza a rechazar invitaciones a almorzar a otras partes.

Como leen, la filosofía estoica enseña a no vivir perturbado ni atemorizado por los factores externos. El hombre sensato no se preocupa por eso, puesto que sabe como adaptarse para seguir viviendo. 

Recomiendo leer las enseñanzas de los filósofos estoicos como Séneca, Marco Aurelio y las máximas de Epicteto para empezar.

¡Ánimos y a seguir adelante!

Diario de Efrain
Escrito por: David E. Misari Torpoco
14 de diciembre de 2021