Vulnerables ante el cambio climático

Hace un mes aproximadamente recibí un correo electrónico de un amigo que llevaba por título Salvemos al planeta. Pensé que era una cadena, pero al abrir el mensaje y leerlo me di cuenta que era un artículo en inglés de un tal Michael Woods y trataba sobre la protección del medio ambiente. La fecha era del 15 de noviembre de 2006 y Woods había publicado ese artículo en el Times, además, empezaba con esta frase: «Nosotros hemos visto la película de Al Gore y hemos leído el informe de Nicholas Sterm. Ahora es el turno de la legislación». 

El contenido del artículo trataba sobre la prevención que deben tomar los países europeos ante el cambio climático que ya es una realidad, pero debido a la intensidad de la sentencia citada me puse a pensar que la misma propuesta puede presentarse a las naciones latinoamericanas, entre ellas, el Perú. Por ello decidí investigar por mi cuenta un poco más sobre esto y elaboré un par de estudios –a través de lecturas, artículos, textos y separatas– sobre los últimos problemas climáticos en nuestro medio y me llevé una tremenda sorpresa, pues existen investigaciones serias (objetivas), profundas y fundamentadas que advierten claramente que las mediciones efectuadas respecto al impacto ambiental producirá cambios climáticos en países como el nuestro y han soslayado factores que son característicos del territorio peruano, lo que representaría un efecto mayor a futuro. Por un lado, la Comunidad Andina destacó hace dos años que los efectos de dicho cambio no afectarán significativamente a los países que producen grandes emisiones de gases de efectos invernadero, pero SÍ será devastador para las naciones en crecimiento (cuidado con esto). Los que se verán impactados negativamente por la disminución de los glaciares serán los países andinos, debido a que la disposición de agua, generación de energía y el aumento de la intensidad aumentarán con frecuencia el conocido Fenómeno del niño. No podemos negar una realidad: mientras los países industrializados cuentan con la tecnología y poseen la infraestructura necesaria para afrontar los embates de este fenómeno climatológico, por otra parte países como 

el Perú dependen de la cooperación técnica y sustentada en acuerdos internacionales para adoptar medidas efectivas de mitigación o adaptación al cambio climático. Llegados a este punto entendamos algo, que nuestra biodiversidad nos hace cada vez más vulnerables. Casos como la deforestación no solo convierten a las naciones amazónicas en contribuyentes a las emisiones de CO2 hacia la atmósfera, puesto que también neutralizan la capacidad de la Tierra de regenerar la naturaleza que se destruye con esta práctica y anula su condición de ésta de ser «el pulmón de la humanidad». Si esto sigue así, no tendremos futuro, pues no soy profeta ni visionario, soy alguien que quiere conservar la naturaleza y como tal –si la situación sigue así– lo primero que sugiero es ver si el problema es irreversible o no, una vez determinado esto, podemos lograr mucho o quizá no podamos lograr nada, pues de ser así las estimaciones para el año 2030 (apróx.) determinarán un perjuicio considerable para el PBI de nuestro país si es que no se adoptan las medidas necesarias para adaptarnos a los cambios que experimentará el clima de la Tierra en ese periodo de tiempo (el planeta está sufriendo cambios, es como un cuerpo que adolece para llegar a cambiar, lo mismo sucede con la Tierra, está sujeta a cambios climáticos y cada vez son más intensos). Por ello, no nos queda más remedio que aprovechar de la mejor manera los recursos y las oportunidades que nos otorgan los organismos internacionales en la materia, facilitando legalmente su empleo. 

Recuerden que si uno quiere surgir en la vida y se le presenta la oportunidad de estudiar en el extranjero (digamos una beca) ¿no la aceptarían si saben que los beneficiará? En este caso sucede lo mismo, si la ayuda para mejorar las condiciones del clima provienen del extranjero, entonces debemos aceptarla con el fin de mejorar la calidad de vida en el ecosistema y contribuir con la biodiversidad, la cual se hace cada vez más vulnerable.

Diario de Efraín
Escrito por: David E. Misari Torpoco.